CIRUGÍA MÍNIMAMENTE INVASIVA DEL PIE

Guía de recuperación

Recupera tu bienestar paso a paso

En esta guía encontrarás las recomendaciones esenciales para una recuperación segura,
progresiva y efectiva tras tu cirugía mínimamente invasiva del pie.

Fases de la recuperación

Estas tres fases te ayudarán a entender qué esperar en cada etapa y cómo cuidar tu pie para volver a tu ritmo habitual con seguridad.

Cómo poner los vendajes de transición

En este vídeo te mostramos, paso a paso, cómo aplicar correctamente los vendajes de transición una vez retirado el calzado postquirúrgico.

Es una guía práctica para que puedas hacerlo con seguridad desde casa, siguiendo las indicaciones de tu podólogo.

Recomendaciones de calzado deportivo

Al dejar atrás el calzado postquirúrgico, es importante usar solo calzado deportivo con las características adecuadas.
Este tipo de calzado te ayudará a proteger el pie mientras te adaptas poco a poco al movimiento y, más adelante, al calzado habitual.

Antepié ancho y punta redondeada

Suela semiflexible

Drop o talón elevado

Puntera con curvatura elevada

Ajuste seguro de velcro o cordones

Síntomas normales

Durante las primeras semanas tras la cirugía es habitual experimentar ciertos síntomas leves que forman parte del proceso natural de recuperación.

  • Inflamación moderada en la zona operada

    Es normal, especialmente al final del día.

    Usa pomada antiinflamatoria tipo Flogoprofen o Fisiocrem 2 o 3 veces al día.

  • Molestias articulares en tobillo, metatarso, etc.

    Se deben a la adaptación del pie y desaparecen progresivamente.

    Puedes tomar Paracetamol 1 g o Enantyum 25 mg cada 8 horas, si no hay contraindicaciones y según indicación médica.

Signos de alarma

Estos síntomas, aunque poco frecuentes, pueden indicar complicaciones y es importante que sean valorados por un profesional lo antes posible:

  • Dolor intenso que no mejora
  • Inflamación severa que no mejora con el paso de los días
  • Fiebre (38ºC o más)
  • Cambios severos en la coloración del pie

Actividad física

Durante las primeras semanas, es fundamental escuchar a tu cuerpo y no forzar el ritmo de recuperación.

Preguntas frecuentes

No siempre, pero puede ser útil si la inflamación se mantiene o si deseas acelerar la recuperación con ejercicios personalizados.
No es imprescindible en la mayoría de los casos, pero están recomendadas si pasas muchas horas de pie o realizas actividad deportiva.
La vuelta a la actividad física debe ser progresiva. Las actividades de baja o moderada exigencia, como caminar o nadar, suelen retomarse entre las 8 y 12 semanas después de la cirugía. Los ejercicios más intensos o de alto impacto, como correr o practicar deportes competitivos, deben esperar hasta aproximadamente el 6º mes, siempre con supervisión profesional.
Si necesitas operar el otro pie, se recomienda esperar entre 3 y 6 meses, dependiendo de cómo evolucione el pie ya operado.
Dependerá del tipo de actividad que realices. En trabajos de oficina suele ser posible tras 2-3 semanas; en físicos, puede ser necesario esperar más; el uso de plantillas durante una temporada acelerará el proceso.

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